miércoles, 26 de agosto de 2015

Primer punto en Anduva

El empate cosechado en Anduva no se puede decir que sea injusto, pero tampoco hubiese sido injusto que hubiese ganado cualquiera de los dos equipos. La fortuna no quiso aliarse con ninguno de los dos conjuntos y acabaron en tablas, si bien es cierto que esta fortuna está condicionada por algunas decisiones tomadas desde el banquillo visitante que aquí no acabamos de comprender.

El Real Zaragoza saltó con un 4-2-3-1, con un doble pivote bastante defensivo, que mantuvo el choque controlado durante la primera hora de partido, y los extremos a pierna cambiada. Pedro, disfrazado de extremo izquierdo fue el encargado de darle salida al balón en el juego blanquillo, bajaba a recibir a la altura de pivotes y conducía a lo largo de su banda. En ese sector izquierdo se juntaban el propio Pedro, Ángel y Aria y dejaron algunas de las mejores combinaciones del encuentro durante los primeros 20-25 minutos. En la banda derecha Hinestroza y Bertran llevaban peligro de forma más directa, el colombiano se iba un poco para adentro dejando espacio para las subidas por banda del de Puebla de Segur. 

Alineación inicial (http://best11.eurosport.com/es/create)
Conforme avanzaba el partido, el fuelle de los visitantes empezaba a no dar más de sí, algo no demasiado raro en las fechas finales de agosto. Avanzado el último tercio de partido se produjo el movimiento desde el banquillo que no entendemos desde aquí. Albert Dorca, mediocentro en el dibujo inicial, pasó al centro de la zaga y desplazó a Cabrera al lateral izquierdo, haciendo que Rico subiese al extremo izquierdo y Pedro a la media-punta. El efecto más terrible de todos es que Aria Hasegawa tuvo que pasar al doble pivote junto a un Wilk muy fatigado. El japones llevaba fundido y desconectado desde el descanso. El equipo ya había empezado a padecer los efectos del desgaste varios minutos atrás pero este movimiento hizo derrumbarse totalmente al equipo, metiéndose a defender dentro de su área y encajando el gol del 1-1 con el que se llegaría al final, e incluso sufriendo ocasiones para perder el partido. 

Así finaliza el equipo (http://best11.eurosport.com/es/create)

Lo más sorprendente de todo es que Ranko, en rueda de prensa, hace referencia a este cansancio en sus jugadores: "Había jugadores sin chispa" Y es sorprendente porque el técnico solo realizó dos sustituciones en el encuentro, teniendo en el banquillo a Morán o a Diamanka. El balón de oxigeno que necesitaba el equipo estaba sentado en el banco.

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